lunes, 28 de abril de 2008

28 de abril...

Seís meses…

Sabía que hoy perfectamente iba a sentir especial nostalgia por tí, pero no de tu voz, de tu cotidianidad, de compartir la mía…

Recuerdo aquél 28 de octubre como si fuese ayer… Encontronazo chulesco y seguidamente deseo de más, de mucho más…

Es raro, aún recuerdo la luz de aquél día, la suave brisa que acarició y concentró nuestras simples, pero trascendentales palabras. El olor a calma, a ilusión , a gotas de rocío que nacen cada mañana como yo renací en aquél mismo instante.

Y supongo que hay cosas que no se miden por números, por cifras, o por fechas, pero en ocasiones es complejo hacer caso omiso a recuerdos cronológicamente archivados, de forma paradójica, en la eternidad de un sentir.

Precisamente, por eso, por el simple hecho de que el amor, los sentimientos no pueden ser controlados al cien por cien de una forma lógica y matemáticamente correcta, o concreta, existen ciertos márgenes de error incontrolables.

Yo, no abro mi alma, mi corazón a cualquiera, pero cuando lo hago, me cuesta hacer frente a cualquier desocupación forzosa.

Y siento una sensación extraña al pensar que quizá mientras yo te estoy echando de menos, tú quizá me estés echando de más…

TE QUIERO, y sabes qué es lo mejor de todo? Que desearía hacerlo durante una vida entera, durante NUESTRA vida…

Tengo ganas de besarte…

Razones para quererte…

Fuerzas para estar contigo si me dejas…

TE NECESITO!.

No hay comentarios: