miércoles, 30 de julio de 2008

Homofobia

Leyendo la prensa, me he encontrado con una noticia que me ha impactado. Como ya sabréis, en algunos lugares como Arabia Saudí, la homosexualidad es considerada como un delito. Bueno, pues al parecer, allí han sido detenidos unos cincuenta jóvenes por el simple hecho de participar en una supuesta boda homosexual.

Parece ser que la redada fue una intervención por parte de la “policía religiosa Saudí”, y por la “Comisión para la Promoción de la Virtud y la Prevención del Vicio” – encargada de velar por el respeto de la población bajo las normas islámicas.-

A mi parecer, promover significa avance, elevación… Además, ¿De qué virtud hablan? ¿Del respeto quizá? Entonces… ¿Qué hacen fomentando algo de los que ellos mismos carecen? Eso sin mencionar la atribución de “vicio” a la sexualidad de las personas que aman y desean de una forma no tradicional… Y lo de la “prevención” es que ya me suena a chiste barato, al desconocimiento de la vida, y lo que es peor, a las pocas ganas de querer conocerla dentro de su más pura realidad.

Pero lo más triste de todo esto, es que no sólo ocurre en lugares o culturas tan cerradas como ésta, sino que seguramente, muchos lectores de esta “España tan progre” se habrán alegrado al leer esta noticia, y mañana, cuando vayan por el parque y vean a dos chicos pasear agarrados de la mano pensarán (“Pedazo de maricones…”), y cuando lleguen a su casa y pongan el televisor y observen cómo dos chicas se dedican ciertos arrumacos y carantoñas cambiarán con tremendo asco de canal. Porque si aquí esto no es delito, sí que es algo muy prejuzgado. Y desde luego, para mí es más grave lo segundo que lo primero, puesto que el delito, nos guste o no, está ajustado a una organización social y global donde existen una serie de normas, pero el prejuicio, es un hecho único y personal, responsabilidad de cada persona, y sobre todo símbolo de un idealismo arcaico y poco culto.

miércoles, 23 de julio de 2008

Se acerca...

Estamos en la recta final de la semana, un ligero acelerón como simulacro de un spring bien realizado, un pequeño derrape en la línea divisoria entre lo ordinario y extraordinario, y tendremos el privilegio de atravesar una meta más o menos privilegiada.

Ansiado fin de semana…

Muchas de vosotras tendréis planes, deseos y quehaceres estupendos. Yo tan sólo espero tener un suave baño de tranquilidad, con espuma de descanso y aromas íntimos. Con agua bien fría, que me saque a flote de esta calurosa oleada de verano, que trae consigo tormentas, tempestades típicas de la época, derramando sobre mí grandes chaparrones de inseguridad, e incluso de asombro…

lunes, 21 de julio de 2008

Conflictos

Fin de semana de choque de conflictos, de diversa índole: Laborales, sentimentales y personales. Sensación de dar prioridad a lo que debería hacerse en última instancia. Impresión de haber hecho cosas que no sirven de nada, y como consecuencia, de abandonar la verdadera utilidad de los hechos y las cosas del buen hacer.

De saber y no decir. De querer y no poder. De sentirme encerrada en una situación autóctona, impuesta y que llega a enajenarme de mí misma y mi entorno.

Las obligaciones son de estricto cumplimiento para mí, pero a veces, éstas a su vez nos exigen la dejadez de otras cuestiones que forman parte de nuestros derechos e incluso inhibiciones propias.

Y no es justo…

Demasiadas cosas pendientes…

Sobre todo una conversación que considero clave.

Y el tiempo es oro…

Y me hace sentir mal, el hecho de descuidar mis tesoros más preciados por un puñado de euros.

miércoles, 16 de julio de 2008

"Mira si yo te querré"



Y… ¿Si éstas fuesen las últimas palabras que me dejas?

Ahora, guardo este libro como un gran tesoro. Como los más fieles cristianos custodian su Biblia. Como los mejores traductores conservan sus diccionarios. Y no sólo lo guardo, también lo cuido, lo mimo y lo huelo como tú misma me enseñaste a hacerlo…

Y tengo miedo de continuar la lectura, de adentrarme en la profundidad de su trama, de identificarme con alguno de sus personajes o situación, de deslizarme por sus páginas, de ser acariciada por cada una de sus letras, de sus sílabas e incluso por algunas de sus marcas de puntuación.

Me da miedo enlazar ese punto y final de ficción con un realismo blanco, vacío de vocablos. Me da miedo, que al terminar este viaje intelectual que tú misma me regalaste, no estés esperándome y preguntándome sencillamente qué tal lo he pasado.

En verdad, me da pánico tu ausencia, con todo lo que ello conlleva…

Te espero…

domingo, 13 de julio de 2008

Noche...

Ayer… tarde-noche de reencuentros…

De recuerdos nítidos, delimitados por un contorno firme, de trazos bien definidos, imborrables, fielmente perecederos. Y otros tantos, fruto de una abstracción inexacta, de pinceladas temblorosas, inseguras, donde ahora precisamente añoro la mano realista de un arte irrepetible, donde existía una corriente privilegiada, y donde sin saber muy bien porqué, yo quise ser vanguardia de ella, a pesar de compartir cada una de sus ideas…

Noche también de instinto maternal. Noche no sólo de desear vivir, sino de dar vida… De crear, de moldear, de mejorar… De esbozar un pequeño futuro que siga teniendo en cuenta mi presente –o mi presencia- cuando ya no esté. Y la suya…De dar y recibir amor. De hacerlo compacto en una pieza exclusiva, única, de ambas, de las dos, nuestra… Puro deseo de engendrar nuestro patrimonio más personal y a la vez más preciado.

Noche de miedo escarchado, divisado a través de la niebla de esa atmósfera tuya, tan fría, que creas con ese intento de mirada helada, que provocas con intención, con una desbordante alevosía a tu propio corazón, que palpita entre cálidas llamas de bienestar obviamente mejorables…

Noche de rabia, de sentir…De sentir un tercio de lo que podría sentir teniendo tu presencia, volcando cada imagen, cada sensación, cada momento, 360 grados, dándome un giro de máxima pasión y complicidad. Rabia… Mucha rabia de mantenerte estática, cuando eres merecedora de una movilidad infinita, en un viaje donde tus sueños se juntan con los míos y revolucionan nuestros sentidos, obteniendo un “mucho” compartido…

Compañeros…Perdonad los instantes desaprovechados…

Athyr… Dame tiempo, contigo quiero aprovechar el resto de momentos que me queden en esta vida… Todos y cada uno de ellos, buenos, malos, regulares, pero al fin y al cabo nuestros…

Confía en mí… Créeme…

O lo que es más importante…

CREE EN NOSOTRAS.

martes, 8 de julio de 2008

Triunfo personal

Lo conseguí.

Ahora sí, definitivamente SÍ…

Al fin puedo decir que soy licenciada, bueno, nuevamente licenciada… (Al parecer a mí de pequeña también me daban dos).

Me siento orgullosa, altamente satisfecha y por supuesto agradecida a todos aquellos que desde un principio creyeron en mí. No ha sido sencillo, las trabas, los obstáculos inesperados, y las dudas – que a día de hoy veo como absurdas- , intentaron boicotear ésta –mi carrera- de salto de longitud. A pesar de todo, has sido una experiencia plenamente enriquecedora en muchos aspectos.

Un triunfo personal.

lunes, 7 de julio de 2008

Sobredosis cultural

Siempre he pensado que la cultura es algo gratificante, interesante, capaz de aportar multitud de conocimientos de lo desconocido, y delatar el desconocimiento de lo aparentemente conocido.

Pero como ocurre con casi todo, las cosas, en grandes dosis, en abundancia, también pueden resultar un tanto perjudiciales para la salud.

Y es que, tras este fin de semana, la cultura se me sale por las orejas.Trabajar en fin de semana es malo, pero trabajar en fin de semana de lo mío, con el añadido de que sea el mes de julio es directamente una locura.

Ahora mismo soy incapaz de oír cualquier cuestión procedente del exterior, y mucho menos escuchar. Ahora, tan sólo asmimilo mi eco interno que pide una y otra vez, un poco de "autocultura", la erudición del descanso más ansiado.

Pero aún he de aguantar hasta el jueves. Lo bueno, suele hacerse esperar.

jueves, 3 de julio de 2008

Porque...

La semana avanza sin piedad, los días se abren camino a paso agigantado por el duro asfalto de la realidad más rutinaria, pisoteando en cada zancada, los restos de unos momentos vacacionales, ya casi instantes, que parece ser quedaron náufragos en la inmensidad de una confusión paradójicamente embrollada.

Y quisiera rescatarlos, ponerlos a salvo, ya no por hacer un uso estúpido de ellos, sino porque todo momento, todo instante (al menos lo míos), son creados, son fruto de alguna impetuosa razón dentro de una inspiración de necesidad deseada.

martes, 1 de julio de 2008

De vuelta...

Ayer actualicé contando un poco cómo había ido el viaje de fin de semana con Athyr, pero por "circunstancias" se ha borrado...

Hoy lo resumo en que fuí a un sitio precioso, con alguien muy especial y que me sirvió para desconectar y a la vez conectarme en muchos sentidos.

Ahora, vuelta a la rutina. Tengo dos meses por delante de intenso trabajo, pero con bonitas novedades que he de aprovechar.