domingo, 19 de julio de 2009

Lucha de mosquitos

Ayer, tras nuestros respectivos "actos sociales", yo comida familiar y Peace con unos amigos, cogí los trastos y me fui a su piso. Se me hizo más tarde de lo que esperaba, llegué prácticamente a hora de cenar; ¡Menos mal que teníamos más o menos la cenita hecha!

Mi chica, estafa flojucha anímicamente. No por nada importante, sino por tensiones laborales, y es que en su curro últimamente los exprimen más que a una naranja, y empieza a sentir esa presión. Menos mal que en un par de semanas ambas estamos de vacaciones, eso le ayudará a desconectar. Pues a lo que iba, a pesar de su estado anímico, me recibió con muchos abrazos y mimos.

Terminamos de finiquitar la cena. Ella se hizo una ensalada a base de pepino, rabanitos y cebolla, a la que le acompañó una apetitosa lasaña de carne que se había traído de casa de sus amigos. Yo (la de la dieta), cené un poco de ensalada a base de lechuga, palitos de mar y cebolla, una hamburguesa de verduras a la plancha y un poquitín de queso fresco. Eso sí, ahogué mi abstinencia alimenticia con un poco de vino tinto, que ayudó a hacer mi cena un poco más agradable.

Luego ya en el sofá, mi chica té en mano, me pidió que le leyese en voz alta un capítulo del libro que se estaba leyendo. Lo hice, y le encantó. Y de repente, esa paz que estábamos creando se rompió con la aparición en el salón de un par de mosquitos. Teniáis que haber visto a Peace trapo en mano, buscándolos y luchando contra ellos... Yo me moría de la risa al ver la cara de asesina que ponía... Mató uno, y al final yo me animé, me apunté a la lucha y maté al otro.

Tras el combate, decidimos meternos en la cama. Ella se puso a leer un poco y yo en cuestión de minutos caí rendida. Me he despertado a las 7 de la mañana a causa de los estornudos de Peace ( su dichosa alergía) y la manera brutal en la que se rascaba todo el cuerpo...

Y es que resulta, que al parecer, otro dichoso mosquito entró en la habitación y se ha dedicado toda la noche a picar a Peace. Total, que mi pezqueñina, se ha levantado y se ha ido al salón a leer un poco. Yo le he dicho que me iba con ella, pero no me ha dejado. Así que me he quedado en la cama, solita y desvelada. Sólo he aguantado media hora. Jutso en ese momento me he levantado para irme con ella, pero en cuanto me ha visto, me ha dicho que nos fuésemos ambas de nuevo a la cama.

Eso hemos hecho, no sin antes claro está, presenciar una búsqueda por parte de Peace del dichoso mosquito que le había impedido dormir toda la noche. No lo ha conseguido. Al final, hemos permanecido en la cama hasta eso de las 12 y pico.

Ella tenía comida familiar y yo me volvía a casa. Total, estaba en el baño cuando oigo:

"Lo he matado! Lo he matado! Qué gordo estaba el cabrón!".

Jajaja, finalmente Peace se salió con la suya. Rápidamente he regresado a la habitación y me he encontrado con la escena del crimen. El mosquito, allá a lo alto muerto, pegado en la pared. Yo, que soy más alta que mi chica, lo he recogido con un papel, pero no he podido evitar dejar rastro de la sangre de tal asesinato. Menos mal que enseguida Peace a traído un trapo con agua y he podido borrar la huella de crimen.

Me joroba que mi chica haya pasado tan mala noche (porque ya bastante poco duerme entre semana), pero he de confesar que en el fondo me ha parecido muy divertido. y más teniendo en cuenta que ella se habrá llevado unos siete picotazos y yo ninguno! Creo que, al menos en verano, voy a permanecer siempre s su verita, porque al parecer, les gusta más su sangre que la mía, jejeje... No me extraña! Con el cuerpazo que tiene!

1 comentario:

MI HISTORIA... dijo...

Y si probais a poner un enchufe antimosquitos? a mi me funciona bien el nuevo de Raid, es que me acribillan sino.
Muxuxxxxx