miércoles, 12 de agosto de 2009

Triste. Muy triste.

Estoy aquí, sentada frente a la pantalla del ordenador con mucho que decir y ni idea de cómo expresarlo.

Estoy triste. Muy triste. Con el corazón desenfocado.

El lunes Peace me llamó por teléfono a casa. Enseguida noté su voz fría, dolorida, rasgada, sabía que algo pasaba. Y así era, mi chica en un ataque de angustia les acababa de confersar a sus padres que le gustan las chicas. Sin pensármelo dos veces, me fuí a su casa y pasé la noche con ella.

Al parecer la reacción fue buena (supongo que en parte como consecuencia del susto que se les había metido en el cuerpo al ver a su hija con semejante sofoco), pero bueno, supieron apoyarla.

Pero a partir de ese momento, tras la típica reflexión,estos días empiezan a surgir dudas y preguntas por parte de sus padres e incluso hasta sentimientos de culpabilidad.

Anoche volví a dormir con ella en su casa. Mi chica está bien pero algo desorientada ya que no quiere hacerles daño. Hoy nos hemos dado un "descanso", ya que quería pasar la tarde con sus padres, incluso quedarse a dormir con ellos, y es que supongo que tienen mucho de qué hablar.

Por mi parte vuelvo a repetir que estoy triste. Triste por ella, por su situación, porque son momentos difíciles. Triste por mí, porque vuelvo a estar más nerviosa de lo normal, porque vuelvo a tener de nuevo un considerable bajón de salud, porque tengo miedo de no tener las fuerzas suficientes para apoyarla en este momento y porque a su vez temo explotar yo en cualquier instante como lo hizo ella el otro día.

Pero no... He de mantenerme en pie y permanecer a su lado, como sea, el tiempo que sea necesario. Y me encuentro luchando a contracorriente. Pero sobre todo, sobre todo, me da rabia de que algo tan bonito como el amor, sea del tipo que sea, genere en ocasiones conflictos como éste, porque no es justo. No lo es.

2 comentarios:

Tanais dijo...

Sabes? cuando he leido tu comentario y tu título me he asustado...mucho. Es una movida de las gordas, son sus padres y es lógico que les cueste aceptarlo, por lo que he visto en otros casos al final se acaba pasando hasta que llega un día que lo ven casi de manera natural.

Juntas podréis con todo lo que os propongáis. Ya lo verás.

Espero que tus problemillas de salud no sean nada serio.

Y...he visto una estrella!!! la próxima pediré por vosotras :D

MI HISTORIA... dijo...

Es normal que les cueste un poco pero ya verás todo irá bien y lo aceptaran.
La verdad que teniendoos la una a la otra lo conseguiréis aunque son momentos dificiles todo pasa.
A la mayoría de los padres nos importa que nuestros hijos sean felices, y nos gusten o no, las decisiones, los caminos, las alternativas....tomadas, les apoyamos.
O por lo menos eso es lo que hago yo, porque quiero que se sientan apoyados, comprendidos y queridos, no sé si es lo mejor pero así es como lo hago, con todo el cariño del mundo.
Supongo que los padres de Peace no opinarán muy diferente.
Y tu salud, espero que no sea nada pero cuidate mucho ¿vale?
Muxuxxxxxx